Un delincuente de 22 años fue herido de arma de fuego durante una persecución en el barrio San Martín. Antes, había sorprendido a un matrimonio en el interior de su casa pero, al forcejear con el hombre, que se resistió al robo, escapó sólo con una computadora portátil. Se desconoce quién le disparo.
La pareja dormía plácidamente en su casa del barrio San Martín. Transcurría la madrugada de este miércoles como cualquier otra cuando un ruido despertó a ambos: el hombre, de 63 años, se levantó de la cama y caminó unos pocos metros hasta el comedor, donde se topó con un delincuente desarmado. Al darse cuenta de que, con su mujer, se habían convertido de pronto en víctimas de un asalto, inició un forcejeo. Fue instintivo, una reacción de supervivencia en milésimas de segundo.
Todo sucedió en una vivienda de Agote al 2300, en la que el ladrón ingresó tras romper una puerta del patio interno. Ese fue el ruido que escucharon los moradores, y que los despertó abruptamente. Entonces, se produjo el forcejeo entre el dueño el inmueble y el intruso, que al ver que no iba a salirse con la suya optó, al zafarse, por escapar. Antes, alcanzó a robarse una computadora portátil del comedor, de la que luego se descartaría.
El delincuente huyó por el fondo de la propiedad y las víctimas comenzaron a gritar, en pedido de ayuda. Así, varios vecinos de la cuadra los escucharon los ruidos y salieron a la calle. Se produjo, entonces, una persecución. Poco después, arribó al lugar personal policial de la comisaría quinta -con jurisdicción en el lugar-, que para ese momento ya había sido advertido de lo que ocurría a través de un llamado al 911.
En ese contexto, revelaron las fuentes consultadas por LA CAPITAL, se registraron detonaciones correspondientes a disparos de arma de fuego. A pesar de que se sospecha que el autor de los mismos habría sido alguno de esos mismos vecinos, aún se desconoce la identidad.
Lo cierto es que, a aproximadamente cinco cuadras de la casa donde se había producido el asalto, los efectivos interceptaron a un joven de 22 años cuyas características físicas se correspondían con las descriptas por las víctimas: según informó la Jefatura Departamental a la prensa, el sospechoso había sido herido de bala en la zona intercostal.
Los uniformados aprehendieron al acusado y, en pocos minutos, se dispuso su traslado al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde recibió tratamiento médico y quedó internado, en calidad de detenido, hasta que en horas del mediodía recibió el alta y fue conducido a la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
Un detalle más: al dar su nombre ante la policía, el delincuente mintió. La información correcta de su identidad fue aportada luego a los investigadores por parte de su propia cuñada, quien fundamentó esa maniobra en el afán del ladrón de ocultar que tiene antecedentes delictivos.
El caso ahora es investigado por el fiscal de Flagrancia, Eduardo Amavet, en el marco de una causa judicial caratulada “Robo agravado por efracción y escalamiento”, en la que fue imputado el sospechoso, que deberá declarar en Tribunales. En tanto, la notebook que le había robado a la pareja fue hallada en el techo de la vivienda.